El té verde es una de las bebidas más antiguas del mundo y ha permanecido como bebida de preferencia en los países asiáticos (China, Japón e India), donde además de convertirse en un ritual social, se ha utilizado en las medicina tradicional de China e India como astringente, cardiotónico, estimulante del sistema nervioso central y diurético, entre otros usos.
Es un tipo de té Camellia sinensis que no ha sufrido una oxidación durante su procesado, a diferencia del té negro, ya que las hojas se recogen frescas y después de someterse al secado, se prensan, enrollan, trituran y finalmente se secan.
Los principales principios activos a los que el té verde debe su actividad son: bases xánticas (contiene mayoritariamente cafeína o teína) y polifenoles.
PRINCIPALES PROPIEDADES
Como bebida no azucarada carece de calorías y no contiene proteínas, grasas ni carbohidratos. Su riqueza se atesora en forma de vitaminas, como la A, C y E, algunas del complejo B, y oligoelementos como manganeso, flúor, cinc y cobre.
- AYUDA A COMBATIR EL ESTRÉS
- PODEROSO ANTIOXIDANTE
- SUAVE ESTIMULANTE
- MEJORA EL FUNCIONAMIENTO DEL CEREBRO
- FAVORECE LA COMBUSTIÓN DE LAS GRASAS
- ACELERA EL METABOLISMO
- PREVIENE INFECCIONES
- MEJORA EL SISTEMA INMUNITARIO
- AYUDA A REGULAR LOS NIVELES DE AZUCAR
- MEJORA EL RENDIMIENTO FÍSICO
- REDUCE EL RIESGO DE SUFRIR CIERTOS TIPOS DE CÁNCER
- PREVIENE LAS ENFERMEDADES CARDIOVASCULARES